‘Red One’, desde Rusia con amor
Corre el año 1977, y el mundo no está preparado para Red One. Aun así, se le viene encima más rápida que una bala, más poderosa que una locomotora… y etc., etc.
Jimmy Carter acaba de ser elegido presidente de EEUU, y la URSS acaba de firmar la que sería su cuarta y última carta magna. Los dos grandes bloques políticos viven en un estado de calma chicha.
La sociedad americana es pusilánime y altamente influenciable. Cualquier chiflado carismático es capaz de hacer virar la opinión pública si es que monta un buen espectáculo. Eso es precisamente lo que está haciendo “El Carpintero”, un puto loco que asesina en aras de la virtud y las buenas costumbres. Ningún sospechoso de libertinaje o de ideas comunistas está a salvo.
Esto no beneficia a los intereses de la URSS, que teme nuevas hostilidades por parte de su rival en Occidente. De modo que la KGB se propone combatir al fuego con fuego. Y aquí es donde entra Vera Yelnikov.
Embutida en rojo
El ejército soviético consideraba a las mujeres como la mayor fuente de soldados posible durante épocas de conflicto. Siguiendo este razonamiento, puso en marcha varios programas para animarlas a alistarse. De uno de estos programas salió Vera: el soldado mejor preparado de toda la Madre Patria.
Alta, fuerte, veloz y sigilosa, constituye la máquina de matar perfecta. Además, es inteligente y guapa: el epítome de la mujer rusa. Por todos estos motivos, es elegida para infiltrarse en EEUU. Una vez ahí, se hará pasar por una joven americana, buscará un trabajo y asumirá la doble (o más bien triple, personalidad) de Red One.
Vestida con un uniforme rojo varias tallas demasiado pequeño para el pudor, peleará contra la violencia puritana. De paso, intentará convertirse en el nuevo ojito derecho de América (uno que mire con menos recelo hacia Moscú). Así que manos a la obra.
Rebautizada como Alabama Jane, aterriza en California. Una vez ahí consigue trabajo como asistente de Lew Garner, un viejo director de cine porno dado de vuelta de todo. Al mismo tiempo, comienza su cruzada contra el Carpintero y sus seguidores, protegiendo a hostia limpia a prostitutas y homosexuales.
Red One: Bienvenida a América
Red One es uno de los cómics más divertidos que he leído en mucho tiempo. Provisto de una violencia que recuerda en algo al estilo de Quentin Tarantino, no escatima en sangre y escenas de acción espectaculares.
Vera está rigurosamente preparada para vestir y hablar como una americana, pero no para encajar en su modelo de vida capitalista. Esto propicia grandes momentos de comedia. También la mojigatería imperante, de la que se ríe. Sexualmente desinhibida y repleta de confianza, se maneja como pez en el agua en contextos en los que el hombre americano acostumbra a llevar la voz cantante. Red One tiene algo de parodia social, aun sin hacer proselitismo.
La historia corre a cargo del guionista francés Xavier Dorison. De los dibujos se encarga el matrimonio Dodson, uno de los binomios más conocidos del cómic americano gracias a éxitos tales como ¿Quién es Wonder Woman?, o Harley Quinn: noche y día. Terry a los lápices y Rachel a las tintas se combinan para elaborar vistosos escenarios y atractivos personajes (sobre todo, los femeninos).
Red One fue publicado originalmente entre 2015 y 2016 por la editorial Image Comics. Aunque no está disponible en castellano, puede conseguirse fácilmente en dos tomos de tapa dura: Welcome to America y Undercover.