‘Normal People’: amor, sexo y libros en Irlanda
La adaptación de Normal People, el libro homónimo de Sally Rooney, relata la vida de Marianne Sheridan (Daisy Edgar-Jones) y Connell Waldron (Paul Mescal), y su difícil relación de amor. Desde el último año de instituto hasta que terminan la universidad.
Qué difícil es contar una historia de amor con “solo” el lenguaje audiovisual en una televisión salvaje que exige historias jugosas, llenas de giros narrativos. Qué difícil es y qué bien le ha salido a la productora irlandesa Element Pictures, porque Normal People es una historia de amor, sí, pero también es la historia personal de dos individuos que, a diferencia de lo que la mayoría pudiese pensar, son solo gente muy normal.
Por un lado, la misteriosa Marianne, una chica adinerada, solitaria e insegura que no encaja en el instituto y que sufre las duras consecuencias psicológicas y familiares de la muerte de su padre. Por otro, el apuesto y popular Connell, cuya madre trabaja de limpiadora para la familia de Marianne. Con muchos amigos en el instituto, pero incapaz de salir de su zona de confort.
Aunque lo único en común que tienen los dos es su gusto por la literatura, Marianne y Connell no pueden evitar buscarse una y otra vez, y caer en un amor tan puro que duele y embriaga al que ve la serie.
Especialmente interesante resulta el personaje de Marianne, quien Edgar-Jones interpreta con asombrosa nitidez. Una joven que sufre de un gran complejo de inferioridad por culpa del trato de su familia hacia ella, sobre todo por parte de su hermano, y que siempre está en una lucha consigo misma por demostrar que no es el monstruo que todos dicen que es. Por ser capaz de dejarse amar, siendo quién es y no quién Connell quiere que sea.
Normal People: Un mundo frío y azul
Toda la serie está teñida de azul. El equipo de fotografía compuesto por Suzie Lavelle y Kate McCullough, junto a los directores Lenny Abrahamson y Hettie Macdonald, hacen un trabajo visual realmente hermoso que dota a la historia de una belleza triste y melancólica. Muy en sincronía con los escuetos diálogos de Alice Birch, Mark O’Rowe y, la misma escritora del libro, Sally Rooney.
Sin embargo, Normal people no es todo lo redonda que podría ser. Por ejemplo, resulta extraño que, siendo los dos apasionados de los libros, los protagonistas apenas comenten lo que leen ni lo que escriben, ni hablen de literatura en general. En el caso del personaje masculino, sabemos que le gusta escribir, pero rara vez escuchamos algún texto suyo.
También decepciona a la hora de dibujar un contexto histórico y social. No se perciben de forma clara los efectos de la crisis económica de 2008 (como promete la sinopsis). Solo que existe una sociedad de clases, pero no es nada que no supiésemos.
Y, por último, el desarrollo de la historia de amor en sí tiene momentos un poco inverosímiles, desde mi punto de vista, utilizados para forzar giros de guión y revolver un poco la trama.
Normal People nos mete en la vida de dos personas que se ven forzadas a participar en un mundo frío y azul en el que la gente se esfuerza por ser normal, aunque no sepan lo que eso significa. Si tenéis curiosidad, podéis disfrutar de esta sencilla serie irlandesa en las plataformas Starz o RakutenTV.