Mystic Braves: psicodelia bañada por el mar en su disco ‘Pacific Afterglow’
Comienza una nueva era para los californianos Mystic Braves, una de las bandas actuales más atractivas de la escena californiana. Y la abren con Pacific Afterglow, sin duda su disco de consagración.
Con este nuevo álbum, el garage marca de la casa ha evolucionado de manera natural hacia una nueva psicodelia 2.0 inspirado en bandas como Parcels, Tame Impala o The Strokes. Y lo hacen dejando más de lado el fuzz, ganando en luminosidad, sonido 80’s y 90’s y atmósferas más oníricas.
Los dos miembros originales de la banda siguen siendo Julian Ducatenziler y Shane Stotsenberg, quienes grabaron el disco con la figura del productor Kyle. Juntos han conseguido un sonido más limpio, moderno, brillante y etéreo. La nueva formación está compuesta de ocho integrantes y ha agregado percusión y dos coristas. Supone así un nuevo concepto de directo con el que Julian quiere conseguir un “sonido más amplio” que realmente se alinee con los tonos cósmicos que caracterizan a Pacific Afterglow.
Y no es esta la única evolución sustancial para los Mystic Braves. Como Julian recuerda, con las grabaciones anteriores de la banda: “normalmente tenía ya las canciones escritas y las partes en mente que quería para todos. El nuevo disco tiene un enfoque más colaborativo. Realmente entramos allí y comenzamos desde abajo. La sana metamorfosis del nuevo disco seguramente dejará al público con la misma emoción que sentimos nosotros con cada canción.”
Mystic Braves y su Pacific Afterglow
Antes de su lanzamiento, los californianos nos presentaron ya cuatro singles: Never went away, canción que abre el disco, con la colaboración de Brad Bowers de The Growlers y Warbly Jets en el bajo. Un single centrado en los arrepentimientos existenciales, “las cosas que podrías haber dicho y hecho para cambiar una situación determinada”.
En Sundown su lisergia adopta cadencias funk y soul, mientras que Lonely heart nos regaló un original videoclip donde un taciturno limpiador nocturno bailaba en soledad primero y con una chica después. Como la banda dice, “es nuestro intento de sonar como Gerry Rafferty (cantante escocés). La canción habla sobre la complacencia y sobre el deseo de mirar hacia adelante en la vida“.
El último de los sencillos que nos mostraron es Hanging on un precioso road trip protagonizado por dos enamorados desde las playas californianas. Para Julian, trata sobre “‘aferrarse a los recuerdos de una relación pasada. Cuanto más avanzas, más te atrapan. Puede que el amor no dure para siempre, pero en su eternidad nos aferraremos a lo bueno de la vida tanto como podamos.”
Y así, durante las 10 canciones que integran Pacific Afterglow, Mystic Braves conducen su travesía sonora hacia un nuevo dominio psíquico. Bienvenidos a su nuevo mundo, en el que la experiencia y la nostalgia se apoderan de ellos pero para encaminarlos hacia la nueva era que arrancamos todos este 2022.
Una mirada al pasado… y al futuro
De padre trompetista y madre cantante, Julian se dedicó desde adolescente a escribir canciones y crear bandas hasta que en 2011 fundó Mystic Braves con cuatro amigos más. De San Diego se mudaron a Los Angeles y llevaron su psicodelia pop y sus potentes guitarras sixties por todo el mundo.
Viajar siempre les ha nutrido a la hora de componer. Como Julian afirma: “viajar por Europa y tocar para gente realmente emocionada es uno de los momentos de la banda más destacados”.
Toda esa euforia del tour la reflejaron en su estudio de Malibú. El pasado, los problemas existenciales pero también adoptando un enfoque más moderno, Julian, Shane y Kyle, el productor, empezaron a hacer arreglos y componer en el estudio.
Sin abandonar por completo la psicodelía que siempre los ha caracterizado, reemplazan aquí los pedales de fuzz por pedales de coro (modulación?) y abandonaron gran parte del trémolo utilizado anteriormente para los efectos de delay que transportan las canciones a una atmósfera celestial y de ensueño de los 80. Con la vista puesta en el futuro, la banda está ensayando próximos conciertos y giras con un nuevo concepto de directo fruto de las nuevas incorporaciones a la formación.