Los gatos y el plátano de Andy Warhol. Vol 2

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El frío ha venido para quedarse. Uno no sabe que es el frío de verdad hasta que se tiene que envolver los pies en papel de periódico, es triste de contar, pero cierto, ahora cuando ando suena como si estuviese pisando hojas secas, si pasase cerca de un ciego pensaría que es otoño. ¿Alguien recuerda la película el sexto sentido? Cada vez que iba a parecer un espíritu bajaban las temperaturas y el niño empezaba a echar vaho, pues ahora es como si no dejaran de aparecer espíritus todo el rato.

Los gatos me tienen cansado. Según dice el veterinario, el gato que no para de dejarme regalos en todos lados, está estresado y deprimido por la ausencia de sus dueños. Yo también empiezo a estar deprimido y estresado, y no por eso voy por ahí cagando en los lavabos y las bañeras.

Me ha dicho que evite los movimientos bruscos para no sobresaltarlo, y que no lo mire directamente a los ojos, que eso lo pondrá más nervioso. Ahora voy andando por la casa como un Koala que mira siempre al infinito, si quisieran rodar la segunda parte de la película “Esencia de mujer”, estoy preparado para hacer el papel de Al Pacino (hacía de ciego y siempre miraba a la gran nada, por si alguien no ha visto la película). 

El veterinario dice…

El veterinario le ha mandado un jarabe, se lo he puesto en la comida y hoy me ha vomitado en la almohada. Sabes que tu vida es una mierda, cuando llegas a casa, y ves la pota de un gato que no es tuyo en la almohada, ese sitio donde pones la carita al dormir.

Le he mandado un mensaje a la dueña diciéndole lo que está pasando aquí, y me ha respondido con la foto de una playa en Lanzarote (Costa Teguise para ser exacto). Creo que no piensan ayudarme y estoy solo en este calvario. 

He ido a ver al veterinario otra vez, y dice que debo de echarle el jarabe directamente en la boca. Los veterinarios no es que sean gilipollas, pero se lo hacen de puta madre, o sea, quiere que le abra la boca a un gato que no es mío y que le meta una jeringuilla (sin aguja) con tres miligramos de jarabe dos veces al día. Y espera que haga todo esto sin que me arranque los ojos a arañazos. 

Hoy he vuelto a echarle el jarabe en la comida, (me importa una mierda lo que diga el veterinario) pero algo no ha salido según lo deseado, porque el gato sigue igual, y uno de los que estaba bien, lleva siete horas seguidas dormido, o muerto.

Mi enemigo, el gato naranja

El naranja, aka gato enfermo, es capaz de abrir cajones, chupar todos los cubiertos y cerrarlos como si no hubiese pasado nada. Si no lo veo no lo creo, pero lo he visto, y se me han caído las orejas al suelo con tanta fuerza, que el gato se ha asustado. Flipo con estos animales.

Ya hace varios días que el gato está bastante mejor, no es que yo haya podido echarle el jarabe en la boca, eso era impensable, pero ha venido una amiga de los dueños y le ha puesto una pipeta de algo en la nuca que lo ha relajado un montón.

Yo también quería ponerme una pipeta detrás de las orejas, pero por lo visto solo vale para los gatos. Antes de ponerle esta droga de gatos, no dejaba de maullar algo en un tono muy agudo, algo que yo he traducido como: “Te voy a matar”, “Te voy a matar”, pero después de la pipeta tranquilizadora, está como super feliz y ha empezado a tararear el estribillo del Heroin de la Velvet Underground and Nico, y se pasa todo el rato lamiéndose las pelotillas. En cierto modo le tengo envidia.

Alguien debe de inventar pipetas para humanos, me encantaría ir por ahí super feliz y lamiéndome las pelotas. El mundo me parecería un lugar mejor.

Fiesta de pijamas

El entrenamiento nocturno, (para los dos gatos sanos, el otro solo duerme y caga)  se está intensificando, supongo que la pruebas ironcat serán pronto. Los mamones no dejan de correr de un lado a otro, y ahora suman cosas que puedan hacer mucho ruido, como por ejemplo arrastrar bolsas de plástico por todo el piso, o tirar todo lo que puedan antes de que yo abra los ojos.

Este tema es curioso, cuando abro los ojos paran de hacer ruido. No sé si tengo los párpados muy ruidosos, o tienen un sensor de ojos que les dice cuando los tengo abiertos o cerrados, sea lo que sea, me dan miedo.

Hace dos noches le dieron una paliza a la única planta que hay en la casa, le han arrancado la mitad de las hojas y sacado casi toda la tierra del tiesto, la pobre da pena verla, ahora lleva unos días muy mustia. Según internet puede estar estresada. Ahora entiendo porque los dueños se han ido, esta casa es una puta locura. No sé si existen pipetas para las plantas, pero creo que a esta pobre ya ni con eso la resucito. 

Esta es mi última semana con los gatos, cuando me vaya no los voy a echar de menos, en serio, me encantan los animales, pero es que quiero poder dormir y pasar un día sin coger la palita, ese es mi gran sueño ahora. Si bajas tus sueños a nivel ras de suelo se pueden hacer realidad. 

¿Qué le pasa al Face?

Por cierto, no sé qué le pasa a mi Facebook, pero ahora solo me llegan sugerencias de amistad de japoneses. Facebook, agradezco tus sugerencias, pero vete al carajo. Hace un año tenía 18 amigos en esta red social, un día pregunté si alguien me ayudaba a hacer una mudanza y ese mismo día desaparecieron 5, los restantes solo me dieron “likes”, pero nadie apareció a ayudarme a mover el sofá. Desde aquí quiero agradecer sus likes y decirles a todos, que no se preocupen, que guardaré celosamente todos esos “likes” para cuando me pidan un favor ¡mamones!