‘Al descubierto’ (‘She Said’): el nacimiento del #MeToo, la primera estocada a los cimientos del poder patriarcal
En la película Al descubierto (She Said, 2022), Jodi Kantor y Megan Twohey son esas periodistas que todas queremos ser. Las nuevas Bernstein y Woodward que vimos en la legendaria Todos los hombres del presidente. Ahora, son ellas las referentes. Las dos periodistas del The New York Times lograron sacar a la luz décadas de abusos sexuales perpetrados por el súper poderoso productor de cine Harvey Weinstein y su maquinaria lasciva y dañina contra las mujeres. Sin Kantor y Twohey no tendríamos #MeToo y Weinstein seguiría campando a sus anchas.
Del Watergate al caso Weinstein
El caso Weinstein ha sido el último gran escándalo en el que el periodismo ha podido demostrar su razón de ser. Probablemente, el caso que Jodi Kantor y Megan Twohey llevaron a primera plana del The New York Times con el primer artículo (al que siguieron una serie de ellos) Harvey Weinstein pagó para silenciar acusaciones de abuso sexual durante años, se estudie durante las próximas décadas en las facultades de ciencias de la información de todo el mundo. También, seguramente, alentará vocaciones dormidas para dedicarse a un oficio en horas más que bajas.
Pocos casos han cobrado la magnitud periodística, pero sobre todo, social, del Watergate de Nixon que conocimos al dedillo en Todos los hombres del presidente (1976), y al más reciente caso que aireaba el olor de la ponzoña que pudría las entrañas del cada vez menos luminoso Hollywood.
La directora y actriz Maria Schrader (Unorthodox), con un guion de Rebecca Lenkiewicz basado en el libro She Said de Jodi Kantor y Megan Twohey, lleva el escándalo Weinstein a la gran pantalla consiguiendo una de las mejores películas de 2022. Una de las mejores opciones para acercarte al cine estos días.
La película es frenética desde el minuto uno, el guion está hilado al detalle y las actrices Carey Mulligan y Zoe Kazan están en estado de gracia en los papeles protagonistas. Además, en Al descubierto, también aparece Ashley Judd, una de las estrellas de Hollywood, como Rose McGowan o Mira Sorvino, que acusaron públicamente a Weinstein.
Al descubierto: el octubre que lo cambió todo
Todo cambió (o comenzó a cambiar) con la publicación del artículo en The New York Times en octubre de 2017. Artículo que destapaba décadas de violaciones, agresiones y abusos sexuales en el entorno de la productora Miramax, con el productor Harvey Weinstein como principal señalado.
Weinstein abusó de decenas de actrices y asistentes protegido por un gran paraguas encubridor bajo el que actuaba con el beneplácito de todo un sistema corrupto y maligno. Eso era lo que había. Así funcionaba el tema que, según apunta la investigación del Times, podría extenderse hasta la década de los ochenta. “O lo tomas o lo dejas”. “Hay muchas otras esperando detrás de ti”. “Tampoco te lo tomes así, chica” …
Carreras y vidas destruidas a su paso. Como un tornado donde todo acaba por los aires. Tras la publicación del artículo de Kantor y Twohey, más de 80 mujeres acusaron a Weinstein y pusieron el foco sobre un sistema en el que las violaciones y agresiones sexuales eran el pan nuestro de cada día. Entre ellas, Gwyneth Paltrow, una de las máximas estrellas de Miramax, fue quien más ayudó a las periodistas a sacra este caso a la luz pública, facilitando contactos, nombres, etc.
Investigación periodista con perspectiva de género
Al contrario que ocurría en Todos los hombres del presidente, en Al descubierto, la directora Maria Schrader nos muestra hábilmente retales de la vida de las periodistas en el trascurso de la investigación. Algo que resulta imprescindible para ponernos en sus zapatos y empatizar con ellas y sus vidas complicadas.
Asistimos a una depresión postparto, a la dificultad de la conciliación personal y familiar, al menoscabo profesional por el hecho de ser mujeres. Todo está ahí. No se nos presentan como superheroínas por encima del bien y del mal. Ellas sacan adelante esta historia con mucho en contra, con su vida a cuestas y con el ánimo, muchas veces, en pedazos. Se muestran vulnerables, sin dejar de ser valientes, profesionales y audaces.
Vemos la incertidumbre, los miedos, la especial violencia de las coacciones. Ellas también forman parte de un sistema patriarcal y misógino contra el que luchan y salen vencedoras, pero no sin mostrar sus heridas de guerra.
Al descubierto: una historia de poder, no de sexo
Cuando nos referimos al movimiento #MeToo a través del que mujeres de todas las latitudes denunciaron abusos sexuales, estamos ante una denuncia colectiva hacia las estructuras de poder, no tanto es una cuestión sexual. Aunque el abuso sexual sea el vehículo a través del que se hacen valer esas estructuras de poder cada vez más caducas, la cuestión de fondo continúa siendo la prevalencia de un grupo de personas sobre otros.
En la película Al descubierto comprobamos el precio que hay que pagar por alzar la voz, lo que supone revelarse contra esas estructuras de poder, lo que implica que el grupo minoritario asome la cabeza para decir: “Sí, esto está pasando”.
Y luego está el silencio. Un aliado para que los depredadores puedan seguir ejerciendo su poder. Muchas de las víctimas de Weinstein habían sido indemnizadas previamente y se vieron obligadas a firmar acuerdos de confidencialidad. “Ninguna de las mujeres que participaron en nuestra investigación tenía idea de a qué conduciría, no pensaban que llevaría a un ajuste de cuentas mundial. Queríamos mostrar cómo elecciones individuales valientes llevaron a algo mucho, mucho más grande.”, aseguraban las periodistas en esta entrevista a SModa.
Desde luego, la valentía de todos esos testimonios hizo que este sistema de chantajes, engaños y abusos cayera como una torre de naipes. Con la película Al descubierto podrás acercarte al caso Weinstein y, además, disfrutar de uno de los mejores largometrajes sobre investigación periodística de los últimos años.