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Terror en la sombra: 13 joyas ocultas que todo fan del cine de terror debe ver

En un mundo saturado de sagas, remakes y franquicias, hay películas de terror que, a pesar de su calidad, se han deslizado bajo el radar. Algunas han brillado en festivales, otras han conquistado a pequeños grupos de fans fieles, pero todas comparten algo en común: son inquietantes, originales y absolutamente dignas de ser vistas. Desde atmósferas sofocantes hasta giros de guion perturbadores, aquí recopilamos trece películas de terror del siglo XXI que merecen mucho más reconocimiento del que han tenido. Las ordenamos de menos a más impactantes, pero todas merecen un lugar en tu lista particular.

Además de estas trece recomendaciones, existen otras joyas semi escondidas que merecen su propio culto: Noroi: The Curse, The Devil’s Candy, Lake Mungo, The Autopsy of Jane Doe o Possum son solo algunos ejemplos de películas que, sin grandes campañas, han sabido dejar huella en el género. El terror siempre encuentra su camino, y a menudo lo hace en los márgenes del mainstream, donde hay más espacio para la experimentación, el riesgo y la incomodidad. ¡Vamos allá!:

13 películas de terror que quizá no conoces y deberías ver

13. Wake Up (2023)

Una crítica mordaz al capitalismo de consumo disfrazada de slasher. Un grupo de activistas entra a sabotear un centro comercial y despierta una pesadilla sangrienta. Visualmente estilizada, con una paleta de colores vibrante y estética videoclipera, esta película no se limita a los cuchillos: lanza preguntas incómodas sobre el activismo, el espectáculo de la violencia y la explotación laboral. Aunque su ejecución a veces patina, su intención queda marcada a fuego.

12. The Vourdalak (2023)

Desde Francia, un ejercicio de terror gótico con una estética onírica y cadenciosa que bebe del folclore eslavo. Con un ritmo pausado y un aura de cuento lúgubre, esta historia de vampiros se construye más sobre la tensión atmosférica que sobre el sobresalto. No es para maratones adrenalínicos, pero para quienes disfrutan del cine contemplativo con estética pictórica, es un banquete.

The Vourdalak. Joyas de terror ocultas.
Póster de The Vourdalak. Joyas de terror ocultas.

11. Dark Harvest (2023)

Basada en la novela de Norman Partridge, esta película ofrece una mezcla de terror rural, coming-of-age y monstruos clásicos. En un pueblo donde cada Halloween los adolescentes deben cazar a una criatura llamada October Boy, se esconde una crítica a los ciclos de violencia y a los rituales de paso forzados. Visualmente poderosa, con una criatura icónica y una ambientación de otoño eterno que huele a maíz quemado y fatalismo.

10. No One Will Save You (Nadie te salvará, 2023)

Un home invasion extraterrestre prácticamente sin diálogos, centrado en una joven aislada tanto física como emocionalmente. La tensión está en los cuerpos, en el sonido, en lo no dicho. Una experiencia minimalista que se siente única, combinando ciencia ficción con angustia vital. El diseño sonoro y la expresividad de su protagonista lo sostienen casi por completo.

Póster de No One will Save You.
Póster de No One will Save You.

9. Host (2020)

Rodada durante la pandemia y completamente ambientada en una videollamada de Zoom, esta pequeña joya condensa el miedo digital en apenas una hora. A través de su formato limitado, consigue expandir los límites del miedo. Los jumpscares están medidos con precisión milimétrica, y el uso del espacio virtual se convierte en una herramienta narrativa brutalmente eficaz.

8. Come True (2020)

Una adolescente sin hogar se somete a un estudio del sueño y acaba atrapada en un universo de pesadillas y ciencia desconocida. Estética retrofuturista, atmósfera densa y una tensión que crece como un zumbido bajo la piel. Es una cinta que no busca respuestas fáciles, y que deja al espectador en estado hipnagógico, entre la fascinación y el desconcierto. Un cruce entre The Matrix, A Nightmare on Elm Street y Videodrome.

Póster de Come True.
Póster de Come True.

7. Son (2021)

Una mujer escapa de una secta junto a su hijo, pero pronto descubre que los lazos con el horror no se cortan tan fácilmente. Este thriller psicológico con tintes sobrenaturales se adentra en los rincones más oscuros de la maternidad, el trauma y la culpa. Es una película que cambia de piel: empieza como drama, muta en paranoia, y termina en pesadilla.

6. Al morir la Matinee (2020)

Un festín visual que homenajea al giallo y al slasher de los 80, ambientado en un cine antiguo durante una proyección nocturna. Desde su estética cargada de neones hasta su amor por los efectos prácticos, esta película uruguaya no solo derrama sangre con estilo: también es una carta de amor al acto de ir al cine. El asesino, con su impermeable y cuchillo afilado, podría codearse con los grandes del género.

Póster de Al morir la Matinee.
Póster de Al morir la Matinee.

5. La mesita del comedor (2022)

Una comedia negrísima que se convierte en una de las experiencias más incómodas del cine reciente. A través de una pareja que discute por una mesa, se despliega un infierno cotidiano de microviolencias, frustración y desequilibrios de poder. Es como si Haneke dirigiera un episodio de Escenas de matrimonio pasado por ácido. Minimalismo, sátira y mal rollo doméstico en estado puro.

4. Starry Eyes (2014)

Hollywood como pesadilla corporal. Una joven actriz acepta una audición que la transformará para siempre. Starry Eyes combina body horror con crítica a la industria del entretenimiento y al culto al éxito. Su protagonista se entrega física y emocionalmente al papel, y lo que empieza como ambición se convierte en renacimiento monstruoso. De lo más incómodo que ha salido del indie norteamericano.

póster de Starry Eyes.
Póster de Starry Eyes.

3. Las habitaciones rojas (2023)

Obsesión por el true crime elevada a arte oscuro. Una mujer sigue de cerca el juicio a un presunto asesino mientras se sumerge en su propio deseo de ver más allá de los límites morales. La película juega con nuestra fascinación por el mal, y nos obliga a preguntarnos qué estamos dispuestos a justificar con tal de sentirnos cerca del horror. Fría, cerebral y provocadora.

2. Incident in a Ghostland (2018)

Del director de Martyrs, esta cinta teje una narrativa donde el trauma se convierte en arquitectura. Brutal, confusa y emocionalmente devastadora. No es solo una película: es una experiencia que deja cicatriz. Tiene uno de los giros más crueles del género reciente, y una puesta en escena que exprime hasta la última gota de ansiedad.

Póster de Incident in a Ghostland.
Póster de Incident in a Ghostland.

1. The Dark and the Wicked (2020)

Una obra maestra del terror atmosférico. En una granja aislada, dos hermanos enfrentan una presencia maligna que se alimenta del duelo. No hay redención ni esperanza, solo una oscuridad seca y persistente que te cala los huesos. Cada plano gotea desesperanza, y la opresión es tan constante que incluso el silencio duele. El horror, aquí, es absoluto.

Estas películas no necesitan taquillazos ni grandes presupuestos para dejar huella. Son propuestas que confían en el poder del género para incomodar, provocar y hacerte mirar por encima del hombro. Porque a veces, el verdadero terror no está en lo evidente, sino en lo que se arrastra en la sombra.

Saludos furiosos.