‘Vosotros, el pueblo’: vuelve el López Vilas más crudo y descarnado con sus poemas antisociales
¿Te apetece una lectura fresquita de verano? Pues nada de eso. Hemos venido a jugar y jugaremos. Vamos a mirar a la vida de frente y sin contemplaciones; nos quitaremos la venda y pensaremos. Seremos tan revolucionarias, tan antisistema, que pensaremos. Con los calipos tropicales y las verbenas de verano llega Rafael López Vilas y sus poemas antisociales recogidos en Vosotros, el pueblo. Esto no es literatura de evasión, esto es rock duro para tus retinas.
Menos debates descafeinados y más López Vilas
Leer a López Vilas es siempre un bálsamo contra la desidia y el conformismo en estos tiempos infames de buenismo, discursos anclados en lo políticamente correcto, selfies impostados e ideologías de ocasión. Dice de sí mismo ser un descarriado. Un funambulista que camina a contracorriente para aportar algo de luz a la ponzoña mentirosa en la que retozamos a diario, a nuestra ciénaga de consumismo, prisas y contaminación.
Rafael López Vilas es un lobo estepario que escribe en sus cuadernos negros historias de corruptelas políticas, bajos fondos y casquería. Ese es su nicho de negocio. Me parece estar viéndolo ahora mismo, en su Vigo natal. Un escritor atípico que no encontrarás en las mesas de novedades y best sellers, pero con una verdad de puño y letra tan difícil de encontrar que sorprende y cautiva.
Le conocimos con su prosa maravillosamente descarnada en Tierra Quemada (Versátiles Editorial, 2019) y recientemente ha vuelto a la carga con Vosotros, el pueblo. Poemas antisociales (Versátiles Editorial, 2023).
Vosotros, el pueblo: La revolución no fue, ¿ni será?
A lo largo de las páginas de esta especie de manual de supervivencia que es Vosotros, el pueblo, encontramos algunos de los temas recurrentes en la obra de López Vilas como su repulsa hacia la corrupción política, a los abusos continuados de la Iglesia (en todos los sentidos imaginables) o a la vida monótona de madriguera y Mercadona los sábados por la mañana…
Pero en este poemario antisocial, el escritor gallego ahonda más si cabe en la herida y nos interpela directamente. Sí, a nosotras y nosotros, al pueblo, al populacho llano rendido a los vaivenes del establishment que se atrinchera en el silencio cómplice. La idea imperante parece ser pasar por la vida sin hacer demasiado ruido, sin incomodar a nadie, sin complicarte la vida, porque ya bastante tienes tú con lo tuyo… Y mientras tanto, un nuevo recorte de derechos, más individualismo, el auge de la extrema derecha en toda Europa y el sálvese quien pueda.
Pero él lo ha vuelto a hacer. López Vilas ha sacado de su estuche la pluma implacable para tratar de despertar a esta sociedad aborregada y somnolienta. Alguien tiene que hacerlo, dice. “Alguien tiene que encargarse del trabajo, por sucio que sea. Basura, casquería, despojos, bajos fondos, corruptela política, esos son los asuntos del Lobo”.
Así que la vida era esto
Me tomo la licencia de titular este apartado como el primer poema de este libro, que considero es un excelente punto de partida para transitar todas las páginas de este poemario y paladear cada uno de los sinsabores que López Vilas nos tiene preparados en su menú degustación de realidad sin censuras.
Vosotros, el pueblo mantiene esa crudeza de luz de cocina y sopa fría de los textos que tanto nos gustan de este escritor, pero también tiene mucha ironía, humor y luminosos reflejos de ternura. Tiene mucho de vida de extrarradio, de complicidad, de esas largas charlas con amigos en las que creíamos arreglar el mundo desde cualquier banco con una simple bolsa de pipas.
Este poemario antisocial es absolutamente necesario. Es, como decía, un manual de supervivencia nada complaciente. Un foco de luz fría y punzante hacia esa realidad que invita a apartar la mirada para no ver cómo las larvas se pegan un festín con la carne descompuesta en el mar Mediterráneo. Para no ver cómo la gente se muere lentamente en cualquier acera entre cartones, quizá en tu misma calle. Es más fácil dejarse deslumbrar por los colores vivos de Instagram y los filtros belleza.
Gracias por tu franqueza, amigo, por tu sinceridad, por ser una de las pocas voces críticas y lúcidas que quedan. Gracias López Vilas. Y gracias, Versátiles Editorial, por no dejar estos poemas en un cajón. “El giro de la ruleta no se detiene”. Seguimos adelante.
¿Quién es Rafael López Vilas?
López Vilas (Vigo, 1975) es un lobo perdido. Un lobo que vocifera entre un marasmo de versos mientras camina a contracorriente. Además de leerle en su último libro, el poemario antisocial Vosotros, el pueblo, también puedes disfrutar de su buen hacer con las palabras en Lobo come lobo (Versátiles Editorial, 2018); en la novela Tierra Quemada (Versátiles Editorial, 2019), ambas obras preseleccionadas como finalistas en los premios de Andalucía de la crítica.
López Vilas también fue incluido en Relatos de viaje, libro del XIV Concurso de relatos de viaje Moleskine, y en el libro colectivo Todo esto era campo, de Versátiles Editorial.