Marina Abramovic sorprende y fascina en Asturias
El Museo de Bellas Artes de Asturias inauguró ayer por la mañana Marina Abramović. Retrato y performance en la Colección María Cristina Masaveu Peterson, una de las grandes apuestas expositivas del centro para este verano.
Esta exposición está coorganizada con la Fundación y comisariada por Alfonso Palacio. Se concibe como una pequeña pero selecta muestra que reúne un total de nueve obras de la artista serbia. Siete de ellas procedentes de la Fundación María Cristina Masaveu Peterson y dos propiedades de su presidente, Fernando Masaveu.
Las nueve piezas seleccionadas recorren parte de la trayectoria artística de Marina Abramović. Desde mediados de los años setenta, momento en el que realizó algunas de las performances más importantes de su carrera junto al también artista y compañero Ulay, hasta el cercano 2018, año en el que se fecha Self Portrait with Quartz Crystal, la única escultura presente.
El conjunto elegido supone, además, una excelente representación de la colección de arte contemporáneo que atesora la Fundación María Cristina Masaveu Peterson. Un fondo que cuenta con piezas de creadores emergentes junto con artistas consagrados como la propia Marina Abramović, León de Oro de la Bienal de Venecia de 1997 y Premio Princesa de Asturias de las Artes en 2021.
Marina Abramović y su forma de entender el proceso creativo
Las obras presentes suponen una oportunidad única para conocer el trabajo de esta artista de talla internacional. Asimismo, permiten hacer un recorrido por algunos de los hitos de su trayectoria que la han convertido, en palabras del comisario Alfonso Palacio, “en uno de los grandes nombres de la creación mundial y en auténtica pionera y figura del arte de la performance“.
Las tres primeras obras recogen algunas de sus acciones junto a Ulay, quien fuera su pareja y compañero artístico entre 1976 y 1988. Se trata de Interruption in Space, fotografía perteneciente al conjunto que documentó la performance realizada por ambos artistas en la Academia de Arte de Düsseldorf en enero de 1977; Breathing In-Breathing Out, desarrollada en el mes de abril de 1977 en el Studentski Kulturni Centar (SKC) de Belgrado y, finalmente, Relation in Time, instantánea que registra la performance llevada a cabo en el verano de 1977 en la galería Studio G7 de Bolonia.
El resto de las obras presentes plasman el trabajo de Abramović en solitario. En primer lugar, se expone una pieza titulada Image of Happiness, fechada en 1998 y vinculada a un vídeo realizado por Abramovic dos años antes. Con Holding the Goat se marca la senda recorrida por la artista serbia a comienzos del siglo XXI y que pertenece a la serie Back to Simplicity, a la que también corresponde Looking at the Montains.
La penúltima de las obras corresponde a los años 2013-2014. Se trata de The Scream, Ekeberg Park, fotografía con la que Abramović homenajea el nacimiento de Edvard Munch. Finalmente, la exposición se cierra con la citada escultura, sin duda una de las piezas más singulares de todo el proyecto.
La muestra, estará presente hasta el 4 de septiembre en la sala de exposiciones de la planta -1 del Edificio Ampliación.
Sobre el Museo de Bellas Artes de Asturias
El Museo de Bellas Artes de Asturias es uno de los museos provinciales de bellas artes más importantes de España. Abrió sus puertas en 1980 con una pequeña colección de 350 obras. Cuarenta y dos años más tarde, gracias a una rigurosa política de adquisiciones, así como de donaciones, legados, depósitos y daciones, ya suman más de 15.000.
La pintura es el núcleo más importante de la actual colección del Museo. Cuenta con obra de algunos de los artistas asturianos y españoles más importantes de los siglos XIV al XXI, como El Greco; Ribera; Zurbarán; Murillo; Carreño de Miranda; Luis Meléndez; Goya; Sorolla; Evaristo Valle; Nicanor Piñole; Picasso; Miró; Dalí; Luis Fernández; Palazuelo; Rafael Canogar o Esteban Vicente, entre otros.
Junto a ellos, destacan otros ejemplos de pintura internacional como Tiziano, Veronés, Rubens, John Philip o Foujita.
Asimismo, el museo asturiano atesora una interesante colección escultórica, con ejemplos de la talla de Luis Fernández de la Vega, Antonio Solá, Elías Martín Riesco, Pablo Gargallo, Baltasar Lobo, Faustino Goico-Aguirre, Amador, Rubio Camín, Navascués, Juan Muñoz o Cristina Iglesias, por citar algunos.
Finalmente, completan la colección unos ricos fondos de artes gráficas y fotografía así como una selecta colección de artes industriales compuesta por más de 5.000 vidrios, lozas y planchas calcográficas.