Angel Olsen, la promesa que se convirtió en una deliciosa y talentosa realidad
Aunque Angel Olsen hizo su debut en 2009 y publicó su primer álbum en 2012, no fue hasta el año pasado, con el lanzamiento de su álbum All mirrors, cuando se hizo conocida a nivel mundial. La cantante estadounidense se ha convertido de un tiempo a esta parte en una de las voces femeninas más importantes del circuito indie, gracias a temas como Lark o Sister, uno de los sencillos del álbum My Woman lanzado en 2016.
Es por eso que no deja de sorprender un poco que hace unas semanas (y menos de un año después de haber lanzado el mejor álbum de su carrera) haya decidido darle vida a Whole New Mess, su nueva propuesta discográfica.
‘Whole New Mess’: el nuevo ‘desastre’ de Angel Olsen
A decir verdad, este nuevo álbum no es precisamente lo que podemos catalogar como un álbum de estudio. Se trata de 11 piezas de Angel Olsen en solitario en una iglesia solemne del territorio estadounidense.
Sin embargo, podemos encontrar algunas piezas inéditas y algunas versiones distintas de temas que ya fueron un éxito en el disco anterior. Una especie de ejercicio que ayuda a expandir la creatividad de algunos artistas en la actualidad.
Un disco que desnuda a la autora, que la muestra como un ser natural capaz de regalarnos melodías sublimes y combinaciones de voz y guitarra insuperables. Es que escuchar este álbum se siente como un viaje tranquilo a través de una carretera con lindos paisajes a sus lados.
Precisamente, el hecho de que la voz únicamente esté acompañada por la guitarra eléctrica de Olsen nos deja sentir de manera exacta el alma de cada uno de los temas que componen el disco, como, por ejemplo, la melancolía de Tonight (Without You) o la fuerza vital de What It Is (What It Is).
En conclusión, este nuevo álbum es una joya para todos los amantes de la música cruda, de los que abogan por el “menos es más”. Una muestra intima de creatividad y energía. Una obra maestra que seguro mantendrá a Olsen en un sitial privilegiado en la escena.