‘Pig’: La cerda perdida de Nicolas Cage
En Pig nos encontramos con una nueva película de cine indie protagonizada por Nicolas Cage. ¿Quieres saber de qué trata Pig? La película va sobre un hombre que busca recuperar su mascota robada, que en este caso es una preciosa cerdita trufera.
Como al protagonista de la peli, Rob (Nicolas Cage), se le presupone una venganza contra quien o quienes le robaron su cerdita, la premisa nos puede recordar a pelis de venganzas parecidas como John Wick (2014) o incluso Payback (1999), pero Pig es más que eso.
El invencible Nicolas Cage
En Las Furias somos fans de Nicolas Cage. De todos los Nicolas Cage, porque hay muchos. Está ese actor joven y alocado de sus orígenes que pudimos disfrutar en pelis como Arizona Baby (1987), Birdy (1984) o Corazón Salvaje (1990).
También tenemos al oscarizado y exitoso Nicolas Cage de Leaving las Vegas (1995), Cara a Cara (1997), Con Air (1997), City of Angels (1998) o La Roca (1996).
El cambio de siglo nos trajo a un Nicolas Cage excelente en films como El ladrón de 0rquídeas (2002), El señor de la guerra (2005) o Los impostores (2003), pero todo se torció después de rodar con Oliver Stone la desafortunada World Trade Center (2006), aunque algunos dirían que todo se fue al traste un año más tarde con su Ghost Rider…
A partir de ese momento comenzó a encadenar fracaso, tras fracaso. Acabó participando en películas de muy baja calidad con alguna que otra excepción como Knowing (2009) o su papel en Kick Ass (2010) y desafortunados e innecesarios remakes como el de Teniente corrupto (2009) o, especialmente, el de Wicker Man (2006).
Pero algo ocurrió, hubo un momento en el que pasó de hacer subproductos de bajo presupuesto, a otro tipo de cine de bajo presupuesto, el cine indie. En este tipo de cine, a diferencia del otro, existía una preocupación artística por parte de dirección y producción, además de contar interesantes y arriesgadas historias con buenos personajes.
La excelente Joe (2013) de David Gordon Green, es un buen ejemplo. A partir de aquí combinaría sus trabajos entre estos dos tipos de producciones. En los últimos cinco años parece prodigarse más por el indie fantástico, así que estamos de suerte con Cage.
Últimamente lo hemos podido ver en interesantes cintas como: Mamá y papá (2017), Mandy (2018), Color Out of Space (2019), Willy’s Wonderland (2021) o de la que va este artículo, Pig.
Además, acaba de salir el tráiler de su nueva locura a las manos del prestigioso director japonés, Sion Sono, Prisioners of the Ghostland:
Los Coppola y la cocina
Nicolas Cage ha trabajado bajo la batuta de lo mejorcito y más laureado de los últimos 40 años de la historia del cine. Desde sus inicios, sus extravagantes herramientas de trabajo actoriles han estado al servicio de directores como: Scorsese, Coppola, De Palma, Lynch, Los Cohen, Stone, Parker, John Dahl, Michael Bay, Ferrara, Paul Schrader, Jonze, Ridley Scott o Herzog.
Habrá quien defienda que eso ha sido posible por ser el sobrino de Francis Ford Coppola, y puede ser verdad, pero todos esos trabajos, sin talento, no se pueden sostener.
A los Coppola, como buena familia italoamericana, les gusta cocinar para toda la familia. Pero eso no siempre es suficiente para hacerte una carrera en el feroz Hollywood. Por suerte, a Sofia Coppola le sobra como directora de cine mucho del talento que le faltaba como actriz.
¿De qué trata Pig? no solo de trufas vive el hombre
Aviso de SPOILERS.
Pig es la ópera prima de Michael Sarnoski y nos cuenta la historia de Rob, un hombre que vive junto a su cerdita trufera en una cabaña de la zona salvaje de Oregón. Alejado de la ciudad y de cualquier contacto humano.
Se dedica a la búsqueda y recolección de trufa y una de las pocas veces que interactúa con la sociedad es cuando llega una vez al mes Amir, interpretado por Alex Wolff (Hereditary).
Una noche, alguien lo ataca y le roba la cerda.
En ese momento, Rob decide regresar a la ciudad de la que se alejó, a Portland. Hará todo lo que esté en su mano para encontrar a su cerdita. Amir es lo más parecido a un amigo que le queda y le acompañará en su búsqueda.
En la ciudad descubriremos parte del pasado del misterioso Rob. La particular profesión que tenía en la ciudad y por la que, aún hoy, todo el mundo lo sigue recordando e incluso reconociendo aunque vista como una especie de mendigo o ermitaño con descuidada barba y no se limpie ni cure sus heridas.
Más o menos podríamos decir que esa es la historia de la película, pero como decía al comienzo de la reseña, Pig, de Michael Sarnoski nos ofrece muchas más cosas.
El director nos plantea un mundo en el que se practica una especie de club de la lucha en las alcantarillas. Nos ofrece un personaje, el de Nicolas Cage, parco en palabras pero con una sensibilidad y conflictos externos e internos de lo más interesantes. Cage lo aprovecha y nos ofrece una interpretación desde lo pequeñito. Llena de detalles, delicadeza y sin las explosiones a las que nos tiene acostumbrados. Hace un excelente trabajo.
Su personaje se llena de heridas y suciedad y en ningún momento hace nada por limpiarse o curarlas. Avanza en su búsqueda cada vez más ensangrentado, sucio y herido. Es como si las heridas y manchas internas que adquirimos en la vida, su personaje las llevara por fuera y no las pudiera esconder. Como si pudiéramos ver el dolor de una vida. El dolor de la pérdida.
Como espectadores deseamos que llegue el momento en el que encuentre a su cerdita trufera y suceda la esperada catarsis de su personaje.
Pig, una sorpresa no apta para todos los paladares
La película está dirigida con precisión y gusto. Su fotografía y música es la ideal para la particular, curiosa y triste historia que nos cuenta.
El toque de “humor” lo tiene el personaje interpretado por Alex Wolff, Amir. Su personaje es una especie de pequeño pez que quiere convertirse en el gran pez de una industria que devora y escupe los restos de cualquiera que se interponga en su camino. La industria alimentaria.
Esa en la que la trufa solo es el pequeño cajoncito de moda de un enorme armario de innumerables espacios.
Wolff parece estar destinado a labrarse una fantástica carrera como actor. Además de su tremendo trabajo en la retorcida Hereditary, a Alex Wolff también lo podemos ver en la última película de Shyamalan, Tiempo.
Pig, es una excelente película que entusiasmará a los admiradores del cine indie de David Gordon Green y que decepcionará a los que esperen encontrarse con la nueva John Wick, aunque comparta con esta algún que otro detalle. Pig se estrena el 14 de julio
Saludos furiosos.